Claro, porque no podemos "echarle la culpa” de engordar al café si lo consumimos con leche, azúcar o crema. O tampoco decir que al beber café adelgazamos si nos la pasamos ingiriendo esta bebida y no comemos nada sólido.
Por ello, es importante saber cuáles son los efectos que tiene el café en nuestro organismo y en base a ello responder a la pregunta de si en verdad el café engorda.
Aportes nutricionales y calóricos del café
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés) ha elaborado una detallada lista sobre los aportes nutricionales y las calorías que aporta el café. A continuación incluimos los datos recopilados en su informe. Una taza de 100 gramos de café tiene:
Energía: 2 Kcal 7 Kj
Grasas: 0.02 gramos
Proteínas: 0.12 gramos
Agua: 99.40 gramos
Tiamina (Vitamina B1): 0.014 mg
Riboflavina (Vitamina B2): 0.176 mg
Niacina (Vitamina B3): 0.191 mg
Ácido pantoténico (Vitamina B5): 0.254 mb
Vitamina B6: 0.001 mg
Vitamina E: 0.01 mg
Calcio: 2 mg
Hierro: 0.01 mg
Magnesio: 3 mg
Manganeso: 0.023 mg
Fósforo: 3 mg
Potasio: 49 mg
Sodio: 2 mg
Zinc: 0.02 mg
Al ser muy baja la cantidad de calorías que aporta si lo bebemos solo, no podemos decir que el café engorda. Pero por supuesto hay que tener en cuenta otras cuestiones…
¿El café engorda? Todo es cuestión de cómo se lo consuma
Como decíamos al principio, no podemos considerar al café culpable si engordamos. Porque no es lo único que consumimos y en muchos casos, tampoco lo bebemos solo.
No es lo mismo un café solo que uno con leche o un capuccino, o con crema… incluso debemos tener en cuenta que hay ciertos tipos de molido que incluyen azúcar en la mezcla.
Según un nutricionista de la Academia Española de Nutrición y Dietética, la forma en que consumamos el café afecta de una manera o de otra en nuestro organismo.
Sin profundizar demasiado en temas científicos, podemos decir que el café es rico en unos antioxidantes llamados polifenoles y que aporta minerales tales como el fósforo, el potasio, el selenio y el magnesio, también nos ofrece vitaminas de los grupos B y K.
Y por supuesto, no podemos dejar de lado a la cafeína, su principal componente y responsable de muchos de los beneficios o contraindicaciones del café. Esta sustancia, conocida por que nos ayuda a ‘estar en modo alerta’ también esá relacionada a la capacidad para bajar de peso.
No hay muchos estudios científicos que evidencien que esto es así en el 100% de los casos, y como decíamos antes, todo dependerá también de cómo bebamos el café. Es bueno saber también que atiborrarnos de tazas de café no nos hará tener la silueta deseada, pero sí que el consumo moderado puede contribuir en acelerar el metabolismo.
La manera en que bebamos el café puede incluso provocar el efecto contrario (al de bajar de peso).
Claro, porquer si lo consumimos con leche, con azúcar o con crema estamos por un lado disminuyendo la eficacia del café y por el otro añadiendo calorías a nuestra ingesta. Y además si le sumamos alguna galleta, unas pastas, una tarta o un bocadillo… todo aquello que nos puede ayudar el café en nuestro metabolismo queda ‘relegado’ por la cantidad de calorías ingeridas al mismo tiempo.
Tampoco podemos superar la cantidad de café por día. El nutricionista nombrado anteriormente aclara que lo adecuado sería entre 100 y 300 miligramos de cafeína por día. De esta manera aprovecharemos algunas de las propiedades de la bebida (mejor si se bebe sola).
Si no engorda, ¿adelgaza?
Tal vez hayas leído u oído sobre la famosa ‘dieta del café’ en la cual se promete adelgazar muchos kilos en pocos días si solo bebemos café. Incluso se muestran casos de hombres y mujeres que han bajado bastante de peso siguiéndola.
Esto no solo es un absurdo, sino que además es malo para nuestra salud, como cualquier tipo de dieta restrictiva en la que únicamente consumimos líquidos o una fruta específica durante toda una semana.
Lamentablemente, este tipo de dietas milagrosas son las que dan mala fama a los alimentos. Creemos que por beber 5 tazas de café al día tendremos un cuerpo de envidia en menos de una semana. ¡Eso es imposible! Y en el caso de que lo logremos, ese descenso de peso estará acompañado de muchos problemas de salud. Porque una persona no puede vivir a café y nada más.
Por último, y esto es más que importante, debemos saber que es difícil responder a la pregunta de si el café engorda, ya que no todos los organismos funcionan de la misma forma y además dependerá de otros factores adicionales como el estilo de vida, el ejercicio o la dieta.
Esto quiere decir que el café puede ayudar en nuestro metabolismo o incluso saciar el apetito o reducir la ansiedad, beneficios relacionados a la pérdida de peso, pero por sí solo no nos hará adelgazar ni engordar.
Debemos quedarnos con la información nutricional, es decir los aportes ‘universales’ que están presentes en todas las tazas de café. Pero también saber que si al café lo cortamos con leche, le agregamos crema, lo hacemos frapuccino o le ponemos dos cucharadas de azúcar será más probable que engordemos. ¡Y ni que hablar si lo acompañamos con un pastel!
